Desde los albores del nuevo milenio hasta la actualidad, el barrio Mariluz en la ciudad de Pasto ha experimentado un cambio notable en su paisaje urbano. Durante estos años, el crecimiento residencial en esta zona ha estado marcado por una serie de tendencias y transformaciones que han dado forma a la vida de sus residentes.
Mariluz comenzó a experimentar una expansión significativa en su desarrollo residencial durante los primeros años del siglo XXI. La demanda de viviendas en una ciudad en crecimiento impulsó la transformación de terrenos anteriormente rurales en vibrantes comunidades urbanas. Nuevas calles, servicios públicos y espacios recreativos comenzaron a definir el paisaje, reflejando la búsqueda de un estilo de vida moderno y conveniente por parte de los residentes.
A medida que la comunidad evolucionaba, se observaba una diversificación en la oferta habitacional de Mariluz. Desde viviendas unifamiliares hasta complejos de apartamentos, la zona comenzó a ofrecer una amplia gama de opciones habitacionales para acomodar a una comunidad cada vez más heterogénea. Esto permitió a las personas elegir el tipo de hogar que mejor se adaptara a sus preferencias y etapas de vida.
A medida que nos acercamos a la actualidad, Mariluz continúa su evolución. La inversión en infraestructuras, la planificación consciente y la adaptación a las necesidades cambiantes han establecido las bases para un futuro prometedor y sostenible. La sinergia entre el crecimiento residencial y las aspiraciones de una comunidad en constante cambio ha dado forma a un entorno único y vibrante.
